Admiten pasado agresivo de Campbell en demanda
AP
Jueves, 23 de Agosto de 2007
| Las peleas de Naomi Campbell con sus asistentes y criadas podrán plantearse en una de varias demandas. Foto:AP
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Nueva York, EE.UU. 23 de agosto. Las peleas de Naomi Campbell con sus asistentes y criadas podrán plantearse en una de varias demandas que la modelo ha enfrentado por agresión.
La supermodelo británica intentó evitar que su empleada doméstica Gaby Gibson hiciera mención a su historial de broncas argumentando que era "escandaloso y prejuicioso".
Sin embargo, en un fallo publicado el miércoles, el juez del Tribunal Supremo estatal en Manhattan Michael Stallman dijo que admitiría los incidentes previos en el caso.
"Esos presuntos actos serían relevantes para las cuestiones en juego y la necesidad de disuasiones futuras", escribió Stallman.
Gibson estaba "muy contenta" con la decisión, dijo su abogado, Lambros Lambrou.
El abogado de Campbell no respondió un mensaje telefónico dejado en su oficina la mañana del jueves.
Gibson trabajó para Campbell entre noviembre del 2005 y enero del 2006. Dice que la modelo de 37 años la golpeó, la llamó por nombres denigrantes y la amenazó con acusarla de robo al no poder encontrar un par de jeans diseñados por Stella McCartney.
Campbell ha negado las versiones y nunca fue acusada en el incidente.
La modelo se declaró culpable en enero de un cargo menor de agresión por arrojarle su teléfono celular a otra empleada, la chilena Ana Scolavino.
Sentenciada a pagar los gastos médicos de Scolavino, asistir a un programa de control de la ira y dedicar cinco días al servicio comunitario, cambió sus trajes de alta costura por una braga del Departamento de Sanidad municipal para barrer, fregar y restregar el estacionamiento de un camión de basura en Manhattan en marzo.
En febrero del 2000, Campbell se declaró culpable de un cargo de agresión en Toronto por golpear a su asistente Georgina Galanis mientras rodaba un filme en Canadá en 1998. Bajo un acuerdo con la fiscalía, Campbell expresó remordimiento y quedó en libertad sin castigo y sin antecedentes criminales.
También enfrentó otra demanda de su ex empleada Amanda Brack, quien la acusó de comportamiento violento. Resolvió el caso este año, pero los términos del acuerdo no se revelaron.
