Un tranvía llamado deseo, en su versión de ópera llega al Teatro de la Ciudad

El Discurso
Miercoles, 15 de Marzo de 2017

La compañía Escenia Ensamble presenta por primera vez en la Ciudad de México la obra del dramaturgo Tennesse Williams en su versión operística. Foto: PI

ver galería

* La compañía Escenia Ensamble presenta por primera vez en la Ciudad de México la obra del dramaturgo Tennesse Williams en su versión operística de André Previn y libreto de Philip Littell

* Bajo la batuta del director concertador Dorian Wilson, la Orquesta Sinfónica del IPN participa en el proyecto, que tendrá funciones el viernes 24 y domingo 26 de marzo

Un tranvía llamado deseo (A streetcar Named Desire), obra clásica del teatro universal escrita por el estadounidense Tennesse Williams en 1947 y adaptada en su versión operística por André Previn y libreto de Philip Littell en 1998, será estrenada por primera vez en la Ciudad de México en dos únicas funciones, el viernes 24 y domingo 26 de marzo.

El Teatro de la Ciudad Esperanza Iris será el escenario para este montaje operístico, dirigido por Ragnar Conde, de la Compañía Escenia Ensamble, después de haber sido estrenada por primera vez en México y Latinoamérica el pasado enero en el Teatro Degollado de Guadalajara, Jalisco.

La historia narra la vida conflictiva de Blanche DuBois, una dama sureña que vive el final de su juventud llena de prejuicios, con delirios de grandeza, refugiada en un mundo irreal que llega a vivir con su hermana Stella y su esposo Stanley Kowalski, un rudo inmigrante polaco perteneciente a la clase proletaria. La confrontación de dos culturas nos revelará una serie de secretos inconfesables que definirá la sobrevivencia del más fuerte.

En esta segunda parte de la temporada —compartió en conferencia de prensa el dramaturgo Ragnar Conde—, la puesta en escena cuenta con el apoyo del Sistema de Teatros de la Secretaría de Cultura capitalina, la beca México en Escena del Fonca y la beca para dirección en escena del Merola Opera Program.

Para las funciones en la Ciudad se contará con la participación de la Orquesta Sinfónica del Instituto Politécnico Nacional (OSIPN), bajo la batuta de Dorian Wilson, director concertador.

Sobre el proyecto de Escenia Ensamble, de la cual es director general y fundador, Conde aseguró que ha sido uno de los montajes más ambiciosos que ha tenido la compañía durante los nueve años de proponer títulos que acerquen más la ópera a la realidad actual de los espectadores. "Se trata de un estreno importante, de una obra muy teatral que cumple 70 años de presentarse por primera ocasión en Broadway”, señaló.

Aseguró que si bien se trata de una versión operística que pone singular atención en la parte musical y vocal, esta nueva propuesta que ha tenido tiempo para madurar resultará una gran sorpresa tanto para aficionados a la ópera como para aquellos que no lo son tanto, debido a la calidad actoral y la complejidad humana, elementos retomados del texto original de Tenesse Williams.

“Después de un mes en que mantuvimos la obra en pausa, ahora para el estreno en la capital nos damos cuenta que este tiempo sirvió para que los personajes se asentaran, agarraran más vida y más carne. Sin descuidar la parte vocal y musical, nos hemos podido avocar a darle esa carne que todo mundo está buscando de los personajes, respetando la época original pero con una perspectiva completamente contemporánea”, detalló Ragnar Conde.

Benito Alcocer, Gerente de la Orquesta Sinfónica del IPN, añadió que para la agrupación y para su director artístico, Enrique Arturo Diemecke, es motivo de gran celebración recibir la invitación para musicalizar Un tranvía llamado deseo.

El proyecto, añadió, forma parte de la primera temporada 2017 de la agrupación, Música, imagen e imaginación, alimentando la participación de la OSIPN en óperas. En esta ocasión, “creemos que nuestra participación va a ayudar al crecimiento artístico de la orquesta, además de enriquecer los programas que regularmente ofrecemos ante nuestro público”, concluyó.

Asimismo, Dorian Wilson, director musical de la obra, se mostró complacido de trabajar en el montaje de uno de los grandes clásicos literarios del siglo XX que toca un tema universal, no confinado a un solo lugar como Estados Unidos. “Recibimos muy buena respuesta en Guadalajara, todos reaccionaban y se identificaban con la historia”, dijo.

Algunos de los actores en escena, como la soprano Adriana Valdés, que interpreta a la sumisa Stella Kowalski; el barítono Enrique Ángeles, que lleva en sus hombros al violento Stanley Kowalski, así como Rogelio Marín, en el papel de Harold, Mitch, Mitchell, coincidieron que la interpretación de los personajes principales de Un tranvía llamado deseo ha sido uno de los retos dramáticos y musicales más grandes que han enfrentado.

Sin embargo, dijeron sentirse afortunados de tomar parte de una obra que no se presenta con mucha frecuencia. La soprano Irasema Terrazas interpretará el papel principal de Blanche DuBois.