Blair sugiere continuar guerras en Irak y Afganistán

AP
Martes, 02 de Enero de 2007

"La amenaza del terrorismo global nos afecta a todos así como a otras naciones", expresó Blair. Foto:AP

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Londres, Inglaterra. 2 de enero. El primer ministro Tony Blair dijo el martes que su país debe permanecer en Irak y Afganistán en el 2007, mientras intenta reanudar las negociaciones de paz en el Medio Oriente.

Sin embargo, la mayor parte del discurso de Año Nuevo _ seguramente su último como primer ministro _ estuvo dedicado a temas nacionales y pidió a su Partido Laborista que prosiga su agenda del "Nuevo Laborismo". Blair ha indicado que dejará el cargo para septiembre, pero no ha precisado la fecha.

"La amenaza del terrorismo global nos afecta a todos así como a otras naciones", insistió Blair.

"Es una de las razones por las que tiene tal importancia que concluyamos las batallas en Irak y Afganistán, donde las fuerzas británicas demuestran día a día que son las mejores del mundo", agregó.

"Mantendré mis compromisos de trabajar incansablemente para reanudar el proceso de paz en el Medio Oriente", indicó el primer ministro.

Miles de soldados británicos abandonarán este año Irak cuando transfieran el control de dos provincias meridionales a las fuerzas iraquíes. Otras fuerzas permanecerán para entrenar y respaldar a la tropa iraquí.

Gran Bretaña tiene unos 7.000 soldados en el sur de Irak, principalmente en el puerto meridional de Basora. En Afganistán tiene emplazados unos 6.000 soldados, la mayoría en la provincia meridional de Helmand, donde más de 30 soldados han caído desde junio.

Blair inició el mes pasado un recorrido por el Medio Oriente para rescatar las negociaciones entre palestinos e israelíes y cimentar su legado en política exterior.

Entre los asuntos nacionales mencionó el Servicio Nacional de Salud, la enseñanza, la delincuencia y la estabilidad económica. Blair insistió que el laborismo encaró "el momento más difícil de todos los gobiernos _ nueve años en el poder, al mediar su tercer mandato".

Tras varios años de andar persistentemente rezagado en los sondeos de opinión ante el Partido Conservador, el Partido Laborista encara su mayor desafío _ propiciar la candidatura del secretario del Tesoro Gordon Brown, que hasta ahora no ha sufrido un reto creíble para reemplazar a Blair.

En su discurso de Año Nuevo, el líder de la oposición conservadora David Cameron indicó que acercará su política a la posición centrista del laborismo.

"Debemos demostrar que, al contrario que el laborismo, seremos un partido que defiende a la clase trabajadora, no a los intereses particulares de los ricos y poderosos", prometió Cameron.