Morales analiza gravedad de inundaciones en Bolivia

AP
Miercoles, 28 de Febrero de 2007

El gobierno descarta declarar "zona de desastre nacional" al país por las inundaciones. Foto:AP

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La Paz, Bolivia. 28 de febrero. El gobierno descarta declarar "zona de desastre nacional" al país por las inundaciones que afectan a más de la mitad del territorio boliviano, pero se analiza aplicar esa medida de emergencia en las zonas más golpeadas, dijo el miércoles el vocero oficial.

La actual situación de las inundaciones causadas por intensas lluvias desde diciembre, comenzó a ser analizada en una reunión de emergencia del presidente Evo Morales con los prefectos (gobernadores) y alcaldes de las regiones más afectadas.

El vocero presidencial, Alex Contreras, informó que en las próximas horas se dará a conocer las decisiones que asumió el gobierno en una reunión que también sostuvo Morales con el gabinete ministerial.

Contreras indicó que lo que quedaba por definir es si se declara zonas de emergencia a los municipios más afectados del oriental departamento de Beni, o a todo el distrito.

"Según el informe que tenemos, el 65% (del territorio nacional) está afectado por el fenómeno de El Niño, no solamente por inundaciones sino también por granizadas, heladas, sequía; pero no amerita la declaratoria de zona de desastre nacional, estamos analizando la posibilidad de la declaratoria departamental en el Beni o de regional", dijo Contreras.

El gobierno se había resistido a la declaratoria, al señalar que sólo se justificaría en caso de una gran catástrofe. Según la oposición, que insiste en pedir la declaratoria, esto se debería a que frenaría su plan de "revolución agraria" en esa región.

Autoridades regionales y locales de las zonas más afectadas e incluso la empresa privada del país, especialmente los productores agropecuarios, exigen que se decrete la zona de desastre en todo Beni, para gestionar una mayor ayuda del extranjero, adicional a la recibida de Argentina, Chile, Estados Unidos, Italia, Perú, Francia, Venezuela, Cuba y de varios organismos internacionales.

Según datos oficiales, las inundaciones se registran en los nueve departamentos del país y, desde diciembre, ya han afectado a 72.000 familias. La Dirección de Defensa Civil, dependiente del Ministerio de Defensa, informó también que 35 personas murieron y que otras 10 permanecen desaparecidas.

Los empresarios sostienen que las pérdidas económicas, por la muerte de 22.500 reses y el anegamiento de 200.000 hectáreas de cultivos, asciende a 250 millones de dólares en Santa Cruz y Beni, ambos en el oriente.

El prefecto (gobernador) de Beni, el dirigente opositor Ernesto Suárez, indicó a la prensa que la reforma agraria del gobierno no podría aplicarse allí hasta que las tierras vuelvan a ser productivas.

"Implica que la ley INRA (reforma agraria) prevé, en uno de sus artículos, que todas las tierras contempladas en desastres naturales no pueden ser sujetas a reversión, este es el tema de fondo", indicó a la prensa, respecto del propósito del gobierno de eliminar los latifundios y expropiar las tierras que no están en producción.