Gobernador de Oaxaca recorre centro de ciudad seis meses después

AP
Domingo, 26 de Noviembre de 2006

Bajo un fuerte dispositivo de seguridad, Ruiz aseguró que "la ciudad de Oaxaca regresa a su normalidad". Foto PI/Francisco GÓMEZ

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Oaxaca, México, 26 noviembre.- El gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, recorrió hoy a pie el centro de la capital de ese estado mexicano por primera vez desde el inicio de las protestas sociales en su contra, hace seis meses, gracias a que policías estatales y municipales han vuelto a patrullar las calles.

La aparición pública de Ruiz se produjo después de que la víspera se viviera una violenta jornada con refriegas entre los manifestantes que exigen su renuncia y la Policía Federal Preventiva (PFP) enviada por el presidente mexicano, Vicente Fox, hace un mes, para recuperar el control del Zócalo (plaza principal).

Los choques callejeros se produjeron alrededor del Zócalo al final de una multitudinaria marcha convocada por la Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca (APPO) y dejaron decenas de heridos y detenidos, y varios edificios y vehículos incendiados.

Bajo un fuerte dispositivo de seguridad, Ruiz aseguró al final del simbólico recorrido que "la ciudad de Oaxaca regresa a su normalidad", en un contacto con la prensa frente al convento de Santo Domingo, en una explanada que hasta el sábado estaba bajo el control de la APPO.

Este bloque de organizaciones sociales, que exige la renuncia del gobernador para poner fin a sus acciones reivindicativas, fue creado en junio pasado cuando se radicalizaron las protestas iniciadas el 22 de mayo por los maestros.

Hasta la llegada de la PFP, la APPO tenía su centro de operaciones en el Zócalo y luego se desplazó a Santo Domingo y a la zona universitaria.

Esta mañana, acompañaron al gobernador los titulares de los poderes Legislativo y Judicial estatales, quienes tampoco se podían acercar hasta ahora a la zona y durante meses, al igual que todos los funcionarios a su cargo, desempeñaron sus funciones en restaurantes, hoteles y casas particulares.

Según Ruiz, "ya no se permitirán más barricadas" en la ciudad como las que los sectores alzados bloqueaban las calles para resguardar sus posiciones.

Anunció que las fuerzas del orden despejarán en breve la última barricada que todavía permanece levantada, situada en la zona de Cinco Señores, junto a la universidad estatal, el último bastión de la APPO.

Informó de que en las últimas horas los efectivos detuvieron a 160 manifestantes, entre los cuales "hay extranjeros, que al igual que a los demás detenidos, se les aplicará la ley", advirtió.

Desde hace más de cinco meses no se veía a ningún grupo policial patrullar la ciudad, con la excepción de la Policía Federal Preventiva, que permanece resguardando el Zócalo.

Después de lo sucedido la víspera, efectivos del Cuerpo de Bomberos y de los servicios de limpieza comenzaron a limpiar nuevamente las calles.

Héctor Anuar Mafud, presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, uno de las sedes incendiadas ayer por los manifestantes, afirmó a periodistas que en ese acto vandálico "se quemaron seis mil expedientes" en materia penal y civil.

Mafud señaló que los documentos penales "se pueden recuperar porque hay copias en los juzgados" pero no así los civiles.

Por su parte, un trabajador de la Cruz Roja explicó que anoche fueron atendidas 80 personas, "entre intoxicados y golpeados, además de otras 45 que llegaron con crisis nerviosa".

El portavoz de la APPO, Florentino López, denunció horas antes que durante los enfrentamientos del sábado fallecieron seis compañeros suyos, aunque aclaró que la información procedía de testimonios y dijo no tener pruebas materiales.

Por el momento, no existen datos oficiales sobre víctimas.

La APPO, que encabeza el movimiento de protesta, se vio disminuida en las últimas semanas cuando la mayoría de maestros del estado decidió regresar a clases tras llegar a un acuerdo económico con las autoridades.