México-Cuba discuten deuda, migración y DDHH
Andrea Rodríguez/AP
Miercoles, 28 de Noviembre de 2007
| Ambas naciones buscarían salir adelante tras una crisis que se gestó al final del gobierno del presidente Zedillo. Foto:PI/Armando ARORIZO
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La Habana, Cuba, 28 de noviembre. México y Cuba negocian actualmente la deuda isleña por unos 500 millones de dólares y esperan lograr un acuerdo antes de fin de año, en un primer paso para hacer efectiva la mejora en sus alicaídas relaciones bilaterales, dijo el nuevo embajador en esta capital, Gabriel Jiménez Remus.
El diplomático mexicano puso además los temas de migración y derechos humanos como aquellos prioritarios de la agenda en la gestión que comenzó aquí en septiembre pasado.
"Estoy muy optimista", manifestó el miércoles Jiménez en declaraciones a periodistas.
"Llegue en un momento de absoluta frialdad en las relaciones de México con Cuba y poco a poco se está manifestando el deseo de ambos gobiernos de volver a reencontrarnos y tratar de superar con el dialogo los pequeños y grandes problemas que se presentaron en el pasado", reflexionó.
Amigo personal del mandatario mexicano Felipe Calderón, Jiménez informó que participó en algunas reuniones con el presidente del Banco Central, Francisco Soberón, para dar cauce a las inquietudes mexicanas de conseguir el pago de los 500 millones de dólares acumulados como deuda por parte de La Habana.
"Existe la voluntad de Cuba de cumplir con las obligaciones", señaló el funcionario al indicar que la semana venidera habrá nuevos encuentros y antes de fin de año se espera presentar una solución.
"Es la primera manifestación política de ambos gobiernos para dejar abierta las posibilidades (de debate) en los otros temas" y demostrar que "la reconciliación va en serio", agregó.
Ambas naciones buscarían salir adelante tras una crisis que se gestó al final del gobierno del presidente Ernesto Zedillo (1994-2000) y se agudizó con Vicente Fox (2000-2006).
El punto más álgido se produjo en mayo de 2004, cuando hubo retiro de embajadores entre otras razones por el voto de México en Ginebra para que se supervise la situación de los derechos humanos en la isla, considerada por La Habana como una conducta de pleitesía a Washington.
Después los diplomáticos retornaron a sus puestos pero las relaciones se mantuvieron distantes.
Otro de los objetivos de Jiménez será lograr un acuerdo migratorio entre los dos estados, pues hay un incremento de los casos de cubanos que arriban a México para llegar a Estados Unidos, donde cuentan con prebendas.
Según cifras de Washington unos 10.000 isleños arriban cada año por esta vía al territorio estadounidense.
Esta cuestión se encuentra entre las más conflictivas porque tiene muchas "aristas" y habrá que "hincarle más el diente", manifestó el diplomático.
Finalmente se hablará sobre derechos humanos, pero Jiménez no aclaró el alcance, pues aún deben estudiarse los mecanismos, mencionó.
Paralelamente, el diplomático indicó que espera ser partícipe de un encuentro entre los cancilleres de ambas naciones, la mexicana Patricia Espinosa y el cubano Felipe Pérez Roque para el primer trimestre del 2008.
No descartó una visita de Calderón a la isla a largo plazo y cuando los temas en diálogo "estén ya muy encaminados", comentó.
