UNAM: Alto descrédito de políticos mexicanos
Prensa Internacional
Miercoles, 26 de Diciembre de 2007
| Los políticos tienden a ser hedonistas, con una actitud megalómana y con superioridad hacia los demás. Foto:PI/Octavio NAVA
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México, D.F., 26 de diciembre. Pedro Isnardo de la Cruz Lugardo, investigador de la Escuela Nacional de Trabajo Social de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aseguró que los políticos mexicanos actualmente registran un alto nivel de descrédito social, debido a que manejan con poca ética sus valores.
Al analizar el comportamiento de los actores políticos en la actualidad, el investigador aseguró que éstos parecen no tener escrúpulos al intentar lograr sus objetivos, por lo que la percepción negativa que se tiene de ellos no ha cambiado, con relación a pasadas administraciones.
De acuerdo con información difundida por la UNAM, De la Cruz Lugardo describió tres características que presentan los políticos mexicanos: 1. Negación de la realidad, es decir, que los involucrados dan por sentada la veracidad absoluta de su discurso y no escuchan información relevante que pueda contradecirlos; 2. Propensión a relacionarse en círculos herméticos e inaccesibles; y 3. Disposición psicológica a la búsqueda del éxito de forma fácil, sin importarles a quién perjudican, además de descuidar su propia salud emocional.
“Estas personas carecen de inteligencia social al perder la capacidad de mantener relaciones sociales estables a nivel personal y familiar. Ven a los otros políticos como a su familia, cuidan más los vínculos con ellos que los propios, a fin de garantizar ascensos y mejores oportunidades”, indicó.
El investigador señaló que muchos políticos han sacrificado su vida y a sus familias para llegar al poder. Este tipo de funcionarios se caracterizan por ser apasionadas por el mando, el control y la manipulación; además de que sólo son capaces de construir relaciones duraderas en el ámbito empresarial, político o social, pues podrían utilizarlas posteriormente en su beneficio.
El académico de la Escuela Nacional de Trabajo Social recalcó que los políticos tienden a ser sumamente hedonistas, con una actitud megalómana en términos de distanciamiento y superioridad hacia los demás, lo que se expresa en sus promesas no cumplidas. Llegar al poder justifica que ofrezcan lo que sea y, cuando lo alcanzan, sus prioridades cambian de forma sustancial.
No obstante, De la Cruz Lugardo señaló que en la actualidad los políticos se encuentran más expuestos a la investigación y crítica sobre sus costumbres, pasado y biografía, por lo que deberían valorar que las acciones que realicen hoy sentarán precedentes para el futuro.
Finalmente, el investigador hizo énfasis en que algunos de los actores políticos adoptan un comportamiento social dependiendo del estilo y personalidad que desean proyectar, por lo que muchos no tienen límites morales ni éticos para tomar decisiones perniciosas.