NBA: Hornets sufren su primera derrota de la campaña

AP
Viernes, 10 de Noviembre de 2006

Warriors de Golden State derrotaron al único club que quedaba invicto al superar por 121-116 a los Hornets de Nueva Orleáns. Foto AP

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E.U.A., 10 de noviembre. Baron Davis, el ex armador de los Hornets, libró un duelo cerrado con su sucesor Chris Paul, en cada canasta y en cada pase. Ambos se echaron a sus respectivos equipos sobre los hombros.

Afortunadamente para los Warriors, los hombros de Davis fueron más fuertes.

Davis tuvo 36 puntos y nueve asistencias contra su antiguo equipo, y los Warriors de Golden State derrotaron al único club que quedaba invicto esta campaña en la NBA, al superar por 121-116 a los Hornets de Nueva Orleáns, el jueves por la noche.

Paul tuvo 34 puntos, su mayor total de por vida, y 10 asistencias, en otro partido destacado, pero Davis no estaba dispuesto a permitir que los Hornets ampliaran su mejor comienzo de temporada en los 19 años de historia de la franquicia.

Nueva Orleáns había ligado cuatro triunfos seguidos, incluida una victoria por apenas cuatro puntos sobre los Warriors, en Oklahoma City, dos días antes.

Davis, quien se aplicó hielo sobre su dolorido pie derecho después del encuentro, se mostró emocionado por la capacidad que mostraron los jóvenes jugadores de los Warriors para sobreponerse a la lesión del escolta Jason Richardson. En cambio, no se concentró mucho en su duelo con Paul, el Novato del Año pasado.

"Mis compañeros jugaron algo del mejor basquetbol que hemos visto en la Conferencia del Oeste, y eso me hace sentir bien", dijo Davis después de recibir felicitaciones de Paul Silas, su ex entrenador con los Hornets, quien asistió al encuentro.

"Ellos son un equipo que peleará por un boleto de la postemporada".

Monta Ellis anotó 21 unidades y Davis acertó cinco de los nueve tiros libres de los Warriors en los últimos 37 segundos, para que Golden State anotara con facilidad y frecuencia ante la defensiva de los Hornets, habitualmente impresionante.

Nueva Orleáns conoció la derrota en la campaña. Dallas, en cambio, supo a qué sabe la victoria.

Al parecer no hay mejor remedio para los Mavericks que jugar en Phoenix.

En junio pasado, los Mavs amarraron su primer boleto a la final de la NBA en la historia, en el U.S. Airways Center. El jueves por la noche, dejaron atrás su racha de cuatro reveses al hilo mediante un triunfo por 119-112 sobre los Suns, que cayeron a una foja de 1-5.

"Supongo que nos ayudó el volver aquí y jugar con un equipo que pasaba problemas como nosotros", dijo el escolta de Dallas, Jason Terry, quien hizo 30 puntos. "Definitivamente nos hemos quitado un peso de encima".

En una nueva edición de la final de la Conferencia del Oeste que se disputó la temporada pasada, el alemán Dirk Nowitzki anotó 35 puntos por los Mavericks. Jerry Stackhouse aportó 23.

El brasileño Leandro Barbosa hizo 30 puntos, Shawn Marion agregó 21 y el canadiense Steve Nash totalizó 20 por Phoenix, cuya foja es la peor de los Suns desde que perdieron 13 en fila al comienzo de la campaña 1996-97.

Los Mavs llegaron al partido con apenas 42,4 por ciento de sus tiros encestados desde el perímetro, en el 27mo lugar de ese departamento dentro de la NBA. Pero Dallas embocó 54,8% de sus disparos ante una frágil defensa de Phoenix.

Por los Suns, Barbosa jugó 42 minutos, en los que totalizó además un rebote, cuatro asistencias y cinco faltas.

En el otro partido de la jornada, LeBron James encestó 19 puntos y repartió 12 asistencias y llevó a los Cavaliers de Cleveland a derrotar por 113-94 a los Bulls de Chicago.

Drew Gooden añadió 20 puntos en tres períodos, el brasileño Anderson Varejao impuso una nueva marca personal al encestar 15 puntos y Sasha Pavlovic agregó 16 puntos para los Cavaliers, cuyos jugadores sustitutos encestaron 21 de 30 tiros a la canasta y permitieron que Cleveland se recuperara de una derrota en período de prórroga el martes ante los Hawks de Atlanta.