Tras golear a Norcorea, Portugal saca pecho

AP
Martes, 22 de Junio de 2010

El entrenador de Portugal Carlos Queiroz. Foto: AP

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RUSTENBURG, Sudáfrica. Ahora que propinó la goleada más abultada en lo que va de la Copa Mundial, Portugal enterró la amargura del empate sin goles en su debut contra Costa del Marfil y ahora está con la moral por las nubes.

"Necesitábamos una victoria así", dijo el entrenador Carlos Queiroz.

La victoria más contundente de Portugal en los mundiales levantó el ánimo y el siguiente objetivo es asegurar el pase a los octavos de final. Los lusos pueden acabar empatados en el segundo lugar del Grupo G junto a Costa de Marfil tras la última fecha, pero ahora disponen de una enorme diferencia goles sobre los africanos.

Mientras la mayoría de los grandes de Europa ha desentonado, Portugal sí supo pegar con contundencia al enfrentarse a un rival rudimentario.

La victoria en Ciudad del Cabo hizo recordar su memorable remontada en los cuartos de final del Mundial de 1966. Entonces, ante el mismo adversario y con Eusebio como líder, revirtieron un 3-0 en contra para imponerse 5-3.

"Hemos cogido mucha confianza", declaró el extremo Simao Sabrosa.

La avalancha de goles, seis en la segunda mitad, fue saboreada por todos, inclusive Cristiano Ronaldo. Tras alcanzar las semifinales en el pasado Mundial, Portugal llevaba largo tiempo sin tener un despliegue tan demoledor. Su clasificación a Sudáfrica se logró a duras penas, con tres empates sin goles, uno de ellos como local ante una Albania con 10 hombres.

La goleada sirvió para silenciar, por ahora, las críticas a los problemas de definición.

Cristiano puso fin a una sequía de 495 días sin marcar con la camiseta de la selección, una que se remontaba a la victoria 1-0 sobre Finlandia en un amistoso jugado en febrero de 2009. Su último gol en una competencia oficial fue en la Eurocopa de 2008.

"Tras el ayuno, Portugal se da banquete", destacó el diario deportivo Record.

Queiroz también puede estar más tranquilo. Sus tácticas ante Costa de Marfil fueron criticadas por el volante Deco, lo que inyectó tensión en el seno del equipo.

Bajo presión ante Corea del Norte, las cuatro variantes de Queiroz rindieron dividendos. Una en particular fue el ingreso de Tiago por el lesionado Deco y anotó dos goles.

Pero el entrenador de inmediato pidió ser cautelosos de cara al duelo con Brasil en la última fecha de la llave.

"Sólo se sumaron tres puntos", dijo Queiroz, quien admitió que el equipo se mostró "rejuvenecido".

"No hay nada decidido", dijo Simao. "Ahora se viene Brasil y tenemos que estar preparados".